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Como puede observarse, frente a un caudal

punta de aportación superior a 500 m

3

/s, el

máximo caudal desembalsado fue inferior

a 50 m

3

/s, comenzando además el desem-

balse una vez que había pasado la punta

de la avenida, con lo que los caudales des-

embalsados no se sumaron a los aportados

por la cuenca aguas abajo de la presa. De

no haber sido por la acción del embalse en

la laminación de la avenida, la población de

Mogón, que se encuentra aguas abajo de

éste, hubiera sufrido una gravísima inun-

dación. Sin embargo, los desbordamientos

fueron de escasa consideración y se de-

bieron principalmente a los caudales del

Aguascebas y de la zona no regulada.

En el siguiente gráfico se muestran los ni-

veles y caudales que se registraron en el

Guadalquivir a su paso por Mogón.

M11 RÍO GUADALQUIVIR EN MOGÓN (JAÉN)

se del Negratín, que, a su vez, hubo de

desembalsar para no superar los resguar-

dos establecidos. Los máximos caudales

desembalsados por Negratín fueron del

orden del 50% del máximo caudal de

aportación, reduciéndose de forma muy

importante los daños que podrían haber-

se producido aguas abajo de no haber

existido el embalse.

En resumen: el episodio de intensas llu-

vias que tuvo lugar en la Sierra de Cazorla

en los primeros días de marzo fue un epi-

sodio muy localizado, tanto espacial como

temporalmente. Los bruscos aumentos de

caudal que se produjeron en algunos ríos

y arroyos de la cabecera de la cuenca del

Guadalquivir dieron lugar a desbordamien-

tos en algunos puntos, principalmente

en cauces no regulados. No obstante, la

existencia de los embalses de Tranco de

Beas, Aguascebas, La Bolera y Negratín,

así como la correcta gestión de los mis-

mos evitó que se produjeran daños muy

importantes en zonas ribereñas y núcleos

de población situados aguas abajo de los

mismos.

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06/03/14-00:00

5,0

4,5

4,0

3,5

3,0

2,5

2,0

1,5

1,0

0,5

0,0

200

180

160

140

120

100

80

60

40

20

0

Nivel (en m.l.a.)

Caudal (en m

3

/s)

Nivel (m.l.a.)

Caudal (m

3

/s)

Puede observarse que el nivel no superó

los 3,80 m (los daños significativos se pro-

ducen a partir de que el nivel alcanza los

4,00 m), y el caudal máximo fue de 140 m

3

/s.

De no haber existido el embalse de Tranco

de Beas el caudal hubiera sobrepasado los

500 m

3

/s, caudal al que, según los estudios

realizados el pasado año por el CEDEX, le

corresponde un nivel de 5,60 m.

Mayor impacto tuvieron las lluvias sobre

el embalse de La Bolera en el río Guada-

lentín, debido a la menor capacidad del

mismo en relación con las aportaciones re-

cibidas. Como puede verse en el siguiente

hidrograma, las aportaciones pasaron en

pocas horas de ser prácticamente inexis-

tentes a 370 m

3

/s.

Los caudales desembalsados por La

Bolera fueron recogidos por el embal-

EMBALSE DE LA BOLERA

(Hidrograma)

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500

450

400

350

300

250

200

150

100

50

0

56

55

54

53

52

51

50

49

48

47

46

Aportación

Desembalse

Volumen

Capacidad

Caudal (m

3

/s)

Volumen (hm

3

)

Confederación Hidrográfica del Guadalquivir | Memoria de Actividades 2014

ÁMBITOS DE GESTIÓN DE LA CHG

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Resumen ejecutivo

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